------------------ ARTÍCULO EDITORIAL ------------------
¡Virgencita, qué milagrosa eres!
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esde hace ya muchos años, los televidentes mexicanos hemos tenido como programa de entretenimiento y “reflexión” telenovelas en las que se muestran pequeños casos en los que se trata de ejemplificar, de manera muy apegada, la realidad. Estos programas o telenovelas han llevado nombres como Mujer, casos de la vida real, Lo que callamos las mujeres, La vida es una canción, A cada quien su santo y la formidable aportación de Televisa con La Rosa de Guadalupe.
Yo en verdad no sé quién realiza los guiones, pero como especialista en la materia, puedo realmente criticar el absurdo y nada inteligente trabajo que se realiza.
Primero que nada, para realizar un excelente guión, es necesario identificar al público al que deseamos dirigirnos; está muy bien, claramente es notorio que muchos de los capítulos de dicha serie van dirigidos a la población juvenil, con la finalidad de concientizarlos en muchos de sus actos; pero yo no logro entender en qué época viven o vivieron los guionistas, pues jamás he escuchado a un joven decir “está del uno” o “del uno al diez” y mucho menos “está del uno y lo que le sigue hasta llegar al diez”; estas frases para referirse a que algo es verdaderamente bueno o les agrada.
Igualmente, otra cosa que es bastante criticable, es la elección de los temas abordados. Por el solo nombre, sabemos que el programa es dirigido a la población católica de México; si a ésta le llegamos por el lado sentimental, narrándole la historia de una niña con cáncer que es curada gracias al milagro de la Virgen de Guadalupe, esta audiencia quedará contenta y reforzará su religión. ¡Pero por favor!, ¿qué católico le pide a la Virgen salvarse de una novatada de preparatoria o evitar que un perro lo moleste? Ninguno; y quien lo pide, obviamente sabe o ve la acción como un suceso más y no como un grandioso milagro, tal como en la serie lo hacen parecer.
¿Acaso ya no se tiene creatividad? Si es así, aquí les va una idea: ¿Por qué no pedirle a la Virgen de Guadalupe una mejor programación para los mexicanos?... No, creo que es mucho pedir…
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